Entrevista con el criminólogo Marco Lagazzi por Eugenia Romanelli @EugeniaRomanel1
¿Cómo defines a un criminal? Cada vez más a menudo esta pregunta es respondida por todos los rounders, por ejemplo usuarios de la red, ignorantes, desinformados y justicialistas en busca de emociones fuertes y, posiblemente, «monstruos». O comentaristas, programas de televisión, editorialistas en las páginas de los periódicos. ¿Cómo es posible? ¿Qué pasó con los tribunales, los expertos, las sentencias?
Marco Lagazzi , un psiquiatra, psicoterapeuta forense, representante del Servicio MiCAL de Psiquiatría Forense en Milán y miembro del Consejo Asesor de AICPF, ha tratado con criminales que han hecho historia del crimen italiano, como el » Monstruo de Florencia «, pero también fue experto médico en la Corte Internacional de La Haya para Crímenes contra la Humanidad en la ex Yugoslavia (TPIY): «Desafortunadamente, cada vez es más común utilizar modelos de evaluación anticientíficos y legalmente inaceptables, para los cuales, de acuerdo con los axiomas no probadas ni comprobables, se establecen correlaciones hipotéticas entre los aspectos clínicos y los factores conductuales, fuera del nexo causal. La matriz de este modelo explicativo surge del espacio creciente que los modelos explicativos psicosociales están tomando en cuenta, para que, por ejemplo, a veces comienza a reconocer un posible valor patogénico causal, o al menos un concausale, en tales como las peculiaridades étnico-culturales, o reacciones emocionales y apasionadas , que por ley no constituyen de ninguna manera debilidades, pero que sin embargo se invocan cada vez más a la defensiva como elementos dotados con el valor de diminutivo o ejemplar en relación con el comportamiento del delincuente «.
En este enfoque, por lo tanto, las relaciones defensivas de sus expertos se vuelven monumentales, una especie de avalancha de información personal y datos confidenciales que son inútiles desde el punto de vista jurídico. «Más o menos, las relaciones deben resumirse y caracterizarse solo mediante investigaciones apropiadas y necesarias, pero en su lugar se llevan a cabo una gran cantidad de entrevistas que recopilan una verdadera» nube «de datos, también relacionados con factores altamente sensibles que son completamente independientes de la evaluación de expertos «.
Un ejemplo? «Es totalmente irrelevante, a los efectos de la evaluación, que el adicto que fue el autor de un robo que intentó asesinar a costa de una anciana tuvo una experiencia íntima con una tía durante su infancia, a partir de la cual extraer la hipótesis de su agresión. hacia mujeres de cierta edad , así como no tiene sentido dar importancia al hecho de que el anciano, víctima de la elusión del cuidador, tuvo dos esposas y muchas aventuras femeninas cuando era un ejecutivo de cuarenta años en la industria, entonces puede deducir la consistencia y, por lo tanto, la adecuación de una elección económica destinada a favorecer a la mujer, cuando simplemente tiene un deterioro cognitivo medio-serio «.
Nube de datos que crea las noticias , la legibilidad de un artículo, la audiencia de un programa: «Exactamente, no tiene que ir por ese camino». La prensa, los medios, no pueden convertirse en tribunales en los que se discuten datos personales robados por informes expertos. establecer un perfil psicológico fuera de cualquier evidencia de literatura y significado concreto, o incluso demostrar una conexión causal con el comportamiento del posible criminal «. Lo que de otra manera podría influir en los jueces, ¿no crees? «Es posible, por supuesto, en la investigación orientada a la» compatibilidad «es habitual emplear una cantidad considerable de pruebas de psicodiagnóstico, que a veces ni siquiera son validadas por la comunidad científica , para hacer inferencias sobre las experiencias inconscientes de la persona, de acuerdo con un método de investigación que no es admitido por la norma (que prohíbe las «evaluaciones psicoanalíticas»), pero lleva al experto a extraer argumentos hipotéticos a través de una especie de «salto triple» deductivo, porque parte de la interpretación de la prueba, a menudo no estandarizada y por lo tanto subjetiva, para extraer de ella una interpretación propia sobre los datos, y luego validar estos supuestos en la evaluación, como si se tratara de un diagnóstico clínico con certeza «.
¿Quién pasa a la prensa los datos personales de los posibles delincuentes ? «Es un asunto muy serio, pero si el modus operandi de los expertos fuera corregido en el origen, el problema no estaría allí: es simple: estas masas inútiles de datos confidenciales no deben ser producidos. , su inserción en los informes de expertos y su paso del informe judicial a la prensa, a los comentaristas de redes sociales y de televisión, superpone la injusticia científica y metodológica a la falta de atención, por parte del administrador de datos, del uso potencialmente incorrecto eso podría predecirse de la misma manera, en una situación mediática en la que obviamente hay un gran interés por lo particular escabroso o sensacionalista , mientras que la dimensión científica y jurídica de la evaluación de los expertos es inevitablemente muy baja «.
Soluciones concretas? «Autorregulación: hoy el psiquiatra está entrenado para llevar a cabo una evaluación lo más rigurosa posible, pero se expone constantemente al riesgo de deslizamiento hacia las asonancias fáciles de modelos de compatibilidad en lugar de linealidad y, sobre todo, de abandonar la elección de» torno bioso » «A favor de adherirse a ser un sujeto mediático, para evitar finalmente la furia de contenido que se siente al preguntar, en cada cena con terceros, si conoce a los» grandes expertos «que se reúnen en salas de televisión y si han aprendido el oficio de ellos. La adhesión a la estricta observancia de los modelos de respeto y protección de la privacidad es un instrumento de rigor, y es fundamental esforzarse por volverse intransigente consigo mismo: renunciar a la adquisición de los datos más ocultos de la vida de las personas «.
Para comprender más, en diciembre de 2018, la editorial ETS publicará un libro titulado «Donde la privacidad no entra. Cómo crear una cultura de privacidad» , en el que Lagazzi y otros autores profundizarán estos y otros temas, para una toma de conciencia en este mundo, cada vez más virtual y líquido, en el que cada vez es más urgente aprender a moverse con destreza para proteger la privacidad y respetar la de los demás.
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